El soñador y su estrella errante



Soy un soñador que no tiene un sueño fijo.
Soy un soñador que no tiene limite de sueños.
Soy un soñador dispuesto a soñar.
Soy... soñador errante y mis sueños libres son.

Mis sueños son míos y no los quiero compartir.
Mis sueños son míos y no los quiero describrir.
En mis sueños veo dos clases de gente,
los que viajan para soñar y los que se quedan sin soñar.



Soy soñador de ninguna parte, sin hogar establecido.
Soy un soñador..., las ruedas se hicieron para rodar.
El camino se hizo para andar, para caminar, para observar,
eso es lo que alimenta un sueño, cualquier sueño.

Cada vez que sueño y miro hacía atrás,
me siento libre, una libertad donde todo parece estar en paz,
en armonía, en equilibrio con el universo,
y me siento bien, siento la unión del cosmos conmigo mismo.

El viento, lleva mi espíritu hacia lo más alto.
La nieve, brilla dentro de mis ojos y me quema,
pero son las personas las que me hacen llorar.
Por eso mi hogar son los sueños, donde puedo viajar en paz.

Me gusta romper la rutina diaria, me gusta hacer cosas nuevas.
Pero el camino no me acompaña, entonces sueño y me siento libre.
Sé, que huyo de la realidad pero...¿Cuál es la realidad?
Mis sueños... o los NO sueños de la gente.


Los días pasan y vuelve la rutina, se hace a veces monótona esta vida.
La única vía de escape es coger el tren de los sueños.
El tren de la libertad, el tren de la sencillez de lo no complicado.


Si quieres ser complicado,
sal de tus sueños y no sueñes más.
El tiempo dirá sí lo soñado,
es valioso y no dolido.

La sencillez puede ser la más bella complejidad soñada.
Si quieres ser complicado... simplemente no sueñes.


Mañana más y mejor.



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